¿Las roscas merodean la Filarmónica?: ¡Es posible!

(Sobre una denuncia de los Srs. Diego Silva y Jorge Ojeda publicada en Aporrea).

Sr. Silva:
Diferimos de usted.
Creo que a una orquesta sinfónica, salvo que la componga el mismísimo Ludwid, le sienta mejor la Heróica que cualquier composición en homenaje a Alí Primera, cantautor por quien (valga la aclaratoria) tenemos un gran respeto y admiración. El tejemaneje nacionalista en nuestras orquestas resulta ya aburrido por lo mediocre de las composiciones, excepciones aparte como la Cantata Criolla pero vamos... ¡hablamos de Estevez!. Este homenaje a Alí Primera más parece un gesto forzado, con un evidente sentido de la oportunidad, para obtener algunas hojitas de laurel en época roja que una propuesta músical para "romper paradigmas", expresión que no deja de ser cómica en el caso. Si de romper paradigmas se trata pues superemos a Beethoven o ¡acabemos con las orquestas!. Es vergonzoso que tengamos que cobijarnos en la sombra del cantor para ir trepando y, de paso, meternos unos centavitos mientras su tumba, hace pocos meses, se derrumbó por el descuido. Si a duras penas emerge el relevo de Alí en el canto popular ¿vamos a estar inventando dislates a costa de su memoria con la Filarmónica?.¿Por casualidad será usted el compositor o, si no es una composición a propósito, el estratega del referido homenaje?. El acalorado tono de su nota así lo sugiere. Teníamos noticia de la movida por voz de algunos colegas músicos y nos pareció un negocito más para ganarse unas pesetas a cuenta de la revolución tal como el Barrio Vivo que menciona, metiendo gato por liebre, es decir, banalización por talento o guataqueo por calidad.
Que es lo que está en juego ¿su interés particular o el "reconocimiento anuestro padre cantor"?. Este rasgamiento de vestiduras por el evento de la Filarmónica contrasta con el silencio ante el inexistente apoyo oficial al homenaje que realizaron los sectores populares y comprometidos hace poco en la Plaza de los Museos.
Por lo demás, el incidente resulta extraño y contradictorio puesto que, según noticia de ayer, la Junta Directiva de la Filarmónica acaba de ser conformada por supuestos afectos a la revolución. La verdad no entendemos ni papa. ¿La programación la decide la junta directiva actual, la saliente o una "orden superior"?. Y si una orden superior decide la programación ¿para qué una junta directiva?. ¿Y quién da la "orden superior"? ¿el recién nombrado director de la Fundación Orquesta Filarmónica o el Director de Artes Auditivas del CONAC? ¡Ah! perdón.. ¡olvidaba que los dos cargos los ocupa la misma persona: el compatriota Jaime Martinez! ¡Que también es director de Virtuosi Caracas!. O acaso ¿Daría la orden la compatriota antropóloga Cristhian Valles quien es de la Junta Directiva del Conac, acérrima defensora de las políticas del actual Ministro de Cultura y quien también se estrena en la Junta Directiva de la Orquesta? (por cierto, admirados estamos al descubrir el conocimientomúsical de la compatriota Valles). Pero ¡oh! ¡sorpresa!... resulta que usted, señor Silva, también esta en la recién nombrada Junta Directiva.¡Que complicación le tocará en la primera reunión de la Junta! ¡Vaina jodida esa de ser juez y parte a la vez!. ¿Entonces? ¿Quién decide? ¿Quién tomara las decisiones en este spaguetti cultural de la quinta república?.
Nos preguntamos: ¿Quién y cómo se decidió lo del homenaje a Alí Primera? ¿Cómo y con cuáles criterios se decide el repertorio?. ¿A cuenta de qué una orquesta debe estar al servicio de las apetencias de alguien en particular?.La decisión del cambio de programación, si la ve desde una óptica menos personal, provoca un resultado bastante higiénico en nuestro maltrecho panorama musical: una orquesta no debe estar al servicio de sus directivos por más rojillos que estos se proclamen. ¡ Por Dios, señor Silva, hágale un favor al país y monte su homenaje con otra orquesta de la cual no sea directivo! . En última instancia, si el asunto se le pone duro lo cual dudamos dadas sus relaciones, inténtelo con el coro de la Legión de María de la Iglesia San Ramón Nonato de El Pilar, Estado Sucre, que lo que vale es la intención y el talento.
Por favor, camarada Diego, no nos someta al engaño y a la queja ladina, que la paciencia se agota de tanto interés disfrazado, de tanto arribismo, de tanto camaleón con boina roja, de tanta mierda cultural...
Luego de la oscura etapa de la Filarmónica con la pasadas juntas directivas escuálidas e incapaces (Sánchez y Quintanilla) y en la que su voz no se escuchó, muchos esperamos una orientación transparente y adecuada de la misma, al margen de las complacencias hacia los amigos o la adulancia hacia el gobierno disfrazada de innovación musical. Padecemos aún en el medio el personalismo adeco de Abreu para quedar a merced de quienes utilizan el embauque,el chantaje politiquero y el oportunismo para abrirse paso.